jueves, 27 de septiembre de 2012

bar de Cayetano

Llueve y es sábado por la madrugada, o es noche de viernes prolongada. Afuera la gente corre para no mojarse, siempre dudo si correr o no bajo la lluvia, ¿uno se moja menos si corre? No lo sé, por eso dudo... Adentro los muchachos bailan cuarteto y la rubia de litro corre, corre, ¿para no mojarse? No lo creo, ya lo está y transpira.
En la puerta de este bar de turno, huérfano de barrio, encuentro una estampita de San Cayetano. Dice: "San Cayetano ruega por nosotros, y no permitas que en nuestros hogares falte pan y trabajo."
Pan y trabajo... La cartulina de la tarjeta está seca en el suelo mojado, tal vez porque San Cayetano no corre, se encuentra imperturbable en el dibujo, o porque estaba bajo el toldo de un negocio cerrado. No importa.
Pan y trabajo dice, y llueve, y en algunos meses (siempre en algunos meses) la ¿democracia? elige representantes, porque el pueblo no gobierna ni delibera sino a través de sus representantes. Pan y trabajo parece algo que se le debe reclamar a esos representantes, por lo menos así lo establece la carta magna, la misma que dice aquello del pueblo que no gobierna ni delibera, eso si se cumple... Preferimos pedirle a Don Cayeta el pan y el trabajo, ¿le pedimos que delibere y gobierne? No, pan y trabajo.
¡Pan, trabajo y circo Cayetano, por favor! Laburo (esclavo) y comida caliente mientras vemos bailar culos con puntaje, al santo le ponemos la vela. Lindo hogar católico, apostólico y romano.

...la estampita la guardo en la de cuero, corro para no mojarme mojándome.

miércoles, 26 de septiembre de 2012

también, asi.


Uno vive su vida como le sale, y no vale, si vale no sale.
¿Elegimos todos los días o transitamos pasos ya marcados? Me quedo con lo primero, en teoría siempre, prefiero elegir y definir (¿lo hago?). Mi postura trata de ser ética y comprometido mi accionar con mi pensar.
Decir basta de vez en vez será bueno, abarajarla y darla de nuevo, a la mano.
Soy un intruso sin identidad de recluso, ni uso.
Igualmente mi destino no destinado marca siempre la esquina, la charla, la birra.
¿Elijo como vivo? No como muero, será eso lo escrito. Que lo vuelvan a escribir entonces, porque no me gustó la cola de la película.
La última frase para estas torpes líneas se la robo a un artista de los trenes, “sólo el amor salvará al mundo”.
...(¿y a mi?)

Es de, ella.


Noche... la noche es a troche y moche, sin coche, no sé manejar, sé algo de la noche, vuelo, veo, oigo la cosa.
Hay una persona que no puede cerrar los ojos, escucha, es de noche.
Hay uno que se droga en soledad, el mundo droga, es de noche.
Hay una mina que nació hombre, garcha por guita, es de noche.
Él vaga por las calles que no le dan cama, no lo aman, busca un recobeco para pasarla, a la noche.
La radio está encendida y se escucha, no se oye, porque es de noche. Las palabras pesan en el aire más espeso de la.
Refugio de locos, de poetas, de borrachos. Refugio de locos poetas borrachos, de prostitutas y prostituyentes, de chorros, de drogones dragones, de insomnes, de serenos de vigilancia, de enfermeros y enfermos.
Todas y todos duermen, de algunos y algunas es la noche, es mi noche. No, che.

domingo, 23 de septiembre de 2012

desconfío...que mejor ¡me voy!

la vida me aburre muchas veces, pero no puedo dejar de vivir.
Las minas me quejan después de la primera, pero me olvido rápido,
la bebida me deforma muchas veces, pero no puedo dejar de beber.
La desconciencia voluntaria me volatiliza tantas otras, no, no. No.

Soy un reincidente de mis consecuencias, mejor me voy.

PARED, nuestra.


En la esquina de Gabriela Mistral y Huelguera, en el barrio de la ciudad autómata de Buenos Aires de Villa Pueyrredón, puede leerse en el frente de una humilde morada (escrito con humilde aerosol negro) la frase: “son gente de mierda”, acompañado dicho slogan de una flecha que indica la puerta del hogar. Las fuerzas del orden dirán que eso es un skrache, otros que es libertad de opinión y que los paredones son la prensa del pueblo, el dueño de casa no brindará su pensamiento pues no lo borrará ni lo borra, ¿será gente de mierda de veraz?
Años atrás asistí a un manifestación que llegaba a la puerta de la casa del terriblemente hijo de mil putas de Videla (¿para qué sirven las puteadas sino?), en ella se arrojó pintura roja a su sexto piso de la piola avenida Cabildo, una manera de hacer visible, con esa pintura, algo de la sangre que hizo correr durante sus años de reordenamiento nacional. Cantamos, insultamos, nos fuimos.
Un mítico stencil ya, reza en la entrada de una casa, del mal llamado por estos dos mil como Palermo Sojo, “en esta casa escuchan Lerner”. Los miembros de esa residencia evidentemente oyen las melodías de aquel pianista, sino ¿por qué verga van a dejar eso escrito allí tantos años?
Sobre la calle Moreno intersección Bonifacini parada del 169 en el territorio separatista conurbanense de San Martín, encontramos una columna que habla: “vive de tus padres hasta que tus hijos te puedan mantener”. Mmm... deja pensando, ¿no? ¿Quién lo escribió? ¿El padre, el hijo o un bienpensado? Pensalo...bien...mal...pensalo...pienso.
Ejemplos nomás, de un arte genuino, genial, la expresión popular. No carta de lectores a La Nación, no blogueros K, no tuiter, no fanzineanarkopunk, no nota del editor al lector de Clarín. Un lápiz, un crayón (que buenas las plastipinturitas!), un marcador, haciendo de las suyas, de las nuestras, de las tuyas, en una pared, en el espacio público.
No falta expresión, faltan paredes y hojas como eSta.

E´así...nomá

La vida es así, se escucha decir desde siempre hoy.¿así cómo? ¿bella? ¿absurda, violenta, incierta, cínica?La vida es así, es todo y nada, es lo único propio y ajeno.Es la resaca, el sexo, la milanesa, un pase de Riquelme, una guerra aquí, otra más allá.Es la artritis y el doctor Mitoski, es el pez pescado y pescador.Afirmo entonces, la vida es así... y la muerte, también.

elijo la tv, tampoco.

En horas de vaso a medio llenar encuentro en el zig zag de TV por cable(de prestado) una audición de autoayuda(el que vende esto en tele, radio y revista, seguro se ayuda auto). Sale la frase de un tal Williams James "si debes elegir entre dos opciones y  no lo haces, esa ya es una elección". Filoforrada barata, simple y corta al pie como pase de Román; así y todo me despierta algunas cuestiones o algo parecido a pensamientos que asaltan al pre juicio instantáneo. Pienso pues, que elijo no elegir, casi como regla o como onda, para no ser tan llano.
No elijo la derecha ni la izquierda. No elijo vivir ni morir. No elijo tener que elegir. No elijo esto o aquello, hago lo de más allá. No elijo el sistema ni el salir del propio. No elijo tampoco ni también. No elijo la realidad, que es una orden del rey, es real, como la Academia Española. No elijo la fantasía, que es un largometraje animado de la megacorporación Disney.
No obstante los cuales(me sigue gustando el cabaret siempre Carpo), de repente, sucede, elijo. Elijo pulsar un botón y desaparecer al gurú de su ayuda en auto, elijo sintonizar "Un príncipe en Nueva York" con Eddie Murphy, o, tal vez, quizá, acaso, probable o posiblemente, NO.